24 jun 2009

Vida Cotidiana, Vol III. "El Samurai debe enfriar las cosas"

2 paquetes de San Vivente. 1 kilogramo de pasta, de fideos al huevo que se convirtieron en una aventura más. Mientras pago los $13,50 correspondientes, la oriental de turno me pregunta si no tengo "treinta chentávo". No contaba con moneda alguna. Me retiro y me prendo un cigarrillo.

Un precario cartel pegado en un poste de luz que dice"DVD´s a Domicilio" y otro que estaba arrancado por la mitad; "Escuela de Artes Marciales", llamaron mi atención. Al darme vuelta veo venir al trote a un señor morrudo, no muy alto, vestido de blanco.

Tenía como una bata pero de tela más gruesa.

Pensé que era yudoka o karateka.

Sus pantalones negros y bombachos me confundieron, no logré identificarlo.

Emprendí la vuelta mientras escuchaba de fondo al misterioso personaje, implorarle a la señorita coreanoa, algo apresurado, que necesitaba hielo.

La mujer, tal vez acostumbrada a ésto, se puso de pie inmediatamente.

Seguí caminando lentamente hacia mi casa y pasé por la puerta de una casa que estaba abierta y se colaba la luz artificial hacia la oscura vereda.

"Escuela de Artes Marciales "Kimi-Do. Escuela de Aikido, Karate-Do y Tae Kwon-Do".

Se ve que alguno cobró feo.

Ahora va a tener más tiempo para dejarse llevar por el otro cartel que había en el poste.

1 comentario:

G. dijo...

saque dos conclusiones: tu barrio tiene es muy completo -escuela de karate, china económica, postes de luz con servicios todo en la misma cuadra- y los karatekas van a alquilar Kung Fu Panda, de una.